lunes, agosto 07, 2006

 

25 años de Pecé

El suplemento del Pais del domigo nos ha recordado, muy por encima, la vida y logros del ordenador personal y lo millonarios que son sus creadores en estos momentos.
Desde los tiempos del Spectrum,el Atari, el Amstrad, el Amiga, el Commodore y otros nombres que nos volvían locos de orgullo, no ha pasado mucho tiempo. Y desarrollo que nos espera se escapa aún de los más imaginativos autores de Ciencia Ficción.
En el libro La Llegada del Senescal se puede leer una premonición cuanto menos curiosa de la evolución tecnológica en unos 1500 años:

Al hombre se le asigna un pecé desde su nacimiento, tan vacío de conocimientos en su momento como él, y con una capacidad de aprendizaje similar a la del humano. Físicamente, no es más que una esfera que pulula alrededor de su asociado,con el que lleva una importante relación de amistad, porque han crecido juntos y su personalidad, gustos, aficiones...son las mismas.
Pecé y humano se conectan sin necesidad de cables, sonidos, etc, a través de un mecanismo injertado en el humano, por el que el pecé lee sus pensamientos en todo momento y traduce los movimientos químicos que producen las sensaciones (que no sentimientos), en su asociado. Frio, calor,incluso rabia, miedo o deseo sexual se delatan por las reacciones químicas que produce nuestro organismo.
Tambien se le puede colocar un pequeño dispositivo de defensa personal que servirá a ambos.
Posee la ciudadanía como los humanos, junto con las naves espaciales y los robots. Todos ellos son miembros de la sociedad por igual, y esa misma sociedad es la que los ha hecho totalmente dependientes unos de otros.

En el articulo del Pais tratan de aventurar el futuro del ordenador, nombrando los famosos cerebros artificiales que funcionen con el complejo sistema de las ondas biónicas.....y uno piensa....¿por qué no? Ya podemos estar conectados a internet desde el portatil en la playa, y no creo que tardemos mucho en poder dar las órdenes sin necesidad de escribirlas.
¿Quíen me dice como será un pecé dentro de cien años?

Comments:
¿Seremos un pc, o el pc seremos nosotros?
Debemos tomar cada dia mas en serio las premoniciones de matrix.
Sin duda.


Comentando que es gerundio.
 
Seremos lo que queramos ser, no hay límites ni barreras (a exepción de los límites establecidos por las estrictas leyes del mercado, que condicionan el avance de la tecnología en nuestro entorno más inmediato, para beneficio de las multinacionales).
Mientras existan recursos en La Tierra, que nos permitan inventar nuevos componentes, o simplemente los ya existentes, seguiremos sacando partido a una máquina que empezó siendo un divertimento más entre nosotros, y que ahora ha revolucionado las formas de comunicación mundial.

El hombre aún está en pañales, empezando a caminar en un mundo donde la comunicación es posible a una escala desconocida hasta entonces, a tiempo real. Si lo hubiesen conocido los romanos, quizá ahora la civilización sería de otra manera, ¿no crees?

¿Que como será el pc dentro de 100 años ??? Eso es imposible de imaginar. Por mucha peli de ciencia ficción que nos pongan, nunca se tendrán en cuenta las consecuancias que realmente producirá este nuevo aparato en las relaciones humanas más cotidianas, las que realmente nos hacen ser personas, neng!

Quizá, forme parte de nuestro cuerpo, y cada vez estaremos más solos, en compañía nuestras inquietudes. Si supiesemos enfocar esas inquitudes, podríamos sacarle partido a este invento, y darle un uso verdaderamente útil.
Al final, solo tenemos eso, INQUIETUDES, como cuando quisimos ir a la Luna.
 
¿Quíen me dice como será un pecé dentro de cien años?
No tengo ni idea. cuando en los años 80 compraba y coleccionaba la MicroHobby toda aquella cacharrerÍa que anunciaban sobre computadoras y accesorios ya parecía de ciencia ficción, en los 90 revisando esas mismas revistas almacenadas y polvorientas aquellos cacharros anunciados parecian del siglo pasado. No creo que haya algo que evolucione tan rapidamente como la microelectronica.
Como nos ibamos a imaginar cuando nos compramos/regalaron nuestro primer CD (algunos no teniamos ni reproductor para escucharlo) que en unos años (no tantos) podriamos duplicarlo, comprimirlo, compartirlo electronicamente y que probablemente en pocos años desaparezca en favor de la música en ceros y unos.
En fin Pilarín
 
Cada vez menos cables,
cada vez más pequeños,
cada vez más ligeros,
cada vez más potentes,
cada vez más rápidos,
cada vez más económicos,
cada vez más versátiles.

Un día normal y corriente del mes de Agosto del año 2106, Leroy salió a comprar un regalo para su hermano. Como cada año, fiel a su compromiso, decidió comprarle una chaqueta de cuero negro para la que tuvo que invertir casi todos sus ahorros. Importándole poco, adquirió el último lanzamiento en chaquetas: la nueva versión de Intel gama XP106, con conexión vía satélite a cualquier departamento de servicio al cliente en todo el mundo. Un millón de gijas de disco duro y una velocidad de conexión de vértigo iban acoplados a la solapa.
Su hermano, alucinado con la nueva prenda, podía saber en cada momento cualquier cosa sobre su familia y amigos. En cualquier momento que la tuviera puesta se comunicaba, e incluso podía identificar el estado de ánimo de cada uno sin necesidad de preguntar nada .
Un día, mientras esperaba el transbordador, decidió consultar sus últimos avances en bolsa, pues había invertido unos euromilloncillos en una importante cadena interplanetaria de importación de ozono, para su nuevo jardín. Observó que esperaba consigo un ingeniero espacial sin trabajo con un abultado currículum, una anciana jubilada divorciada que vivía de alquiler, y un jóven con antecedentes penales que había estado tres veces en la cárcel, por violencia de género. Nadie había articulado ni una sola palabra.
Esperando recibió un comunicado a través de las gafas, donde podía observar con exactitud un rostro desconocido hasta ese momento. La noticia de busca y captura de un joven escapado de la cárcel lo dejó petrificado. Giró la cabeza y comprendió el alcance de su descubrimiento.

Señor Johnson, dijo el joven, digale a su hermano que deje de flipar con tanta tecnología; ni estamos en el siglo XXII, ni esto es un lugar para contar semejantes estupideces. Por cierto señor Jhonson, su casa está muy guapa.
 
Ese día Leroy se había levantado pronto. Había solicitado por Internet varias recetas para hacer croquetas un tanto originales, diferentes, vanguardistas, únicas...las croquetas del futuro, decía. Decidió consultar en la web de su amigo Flop como hacer injertos con ingredientes varios; Flop siempre hacía alusiones a las cosas que más le gustaban; fue precisamente ahí donde había visto la XP106 de cuero negro que con tanta ilusión regalaría a su hermano del alma.

En realidad quería impresionar tanto a su hermano como a su amada esposa. Ella llegaría ese día de un largo y aturdido día de trabajo, y era impensable defraudar a la mujer con la que había decidido pasar el resto de sus días. Unas croquetas híbridas será lo mejor, pensó, mitad de un sabor, mitad de otro; las llamaré las croquetas del siglo XXII, especiales para mi futura tasca restaurante cibernética de próxima apertura. Aquel día, en el Mercado, comprendió que su vida empezaba a tener sentido.
 
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